El mito de las aguas vivas o los cenotes que se tragan a la gente cuando la gente se acerca de una manera inapropiada a los Cenotes, los Cenotes pueden formar como un remolino y atrapar a la gente. Básicamente ese es el mito.
Cenote Sambulá de Motul
Hay un cenote en la ciudad de Motul que va a combinar dos mitos y una leyenda se dice que, en este lugar, en el Cenote Sambulá de Motul también las aguas tienden a salir como si fueran las aguas vivas, pero además están ahí los Aluxes que sirven para cuidar el agua y para protegerla de cualquier intruso.
Hay una combinación para que el agua esté protegida y además vamos a poner una leyenda que se dice que en este cenote Felipe Carrillo Puerto el gran luchador social de principios del siglo XX ahí se reunía con sus compañeros de lucha para establecer estrategias y ver que se iba a hacer al día siguiente Como se iban a hacer esas grandes batallas que se vivieron en esos momentos muy dramáticos de la historia de Yucatán.
Cenote Xkalosayab de Itzincab
También tenemos el caso del Cenote Xkalosayab dicen que el agua del Cenote Xkalosayab puede en algún momento brotar y llevarse alguna persona que esté en la orilla del Cenote.
Este Cenote también tiene otro mito anexo que es que si una persona va a las 12 del día que es a la hora que pasa esto puede encontrarse con un animal que se llama el Burrokat, el Burrokat es un burro, pero es sobrenatural, si la persona ve al Burrokat este animal la va a perseguir Hasta que llegue al parque donde está la iglesia y ahí el Burrokat se da la vuelta y regresa.
Cenote Chen Há de Dzityá
Ahora vamos a ver otro mito que está muy cerca de la ciudad de Mérida que es el Cenote de Dzityá es una Comisaría que está a unos pasos se puede decir de Mérida Entonces ahí se cuenta, que había una familia, hombre, mujer y estaba la mamá del muchacho.
La anciana iba a pedirle comida a su hijo, la esposa se dice al marido que ya le había molestado esa situación que no le diera la comida a su mamá y cuando iba la señora le decían “No, pues se gastó” pues “Hoy no cocinamos”, Entonces la señora se dio cuenta de que aquel hijo le estaba negando la comida, entonces lo maldijo,
“Un día te vas a hundir con todo y casa”
No tardó mucho en que se desplomó según cuenta el mito, que el lugar donde estaba la casa se hundió completamente y así surgió el Cenote de Dzityá.
Recuerda el agua es un bien colectivo de muchísima importancia en estas comunidades mayas prehispánicas y en las actuales también
Acerca del Antrop. Carlos Evia
Carlos Augusto Evia Cervantes fue profesor investigador, durante 40 años, de la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán. Es Licenciado y Maestro en Ciencias Antropológicas por esta institución en la que impartió las asignaturas de Estadística, Antropología en Cavernas, Antropología Simbólica y Análisis Mitológico.
Docente en la Universidad José Martí de Latinoamérica. Asignaturas que imparte: Estadísticas para Políticas Públicas (2018 y 2019) y Antropología de la muerte, según las distintas culturas y religiones (2019 y 2021).
Como antropólogo social ha publicado 9 libros, 20 capítulos en obras colectivas y 67 artículos sobre mitos, cavernas y turismo. También ha impartido conferencias y ponencias en congresos locales, nacionales e internacionales con el tema de mitología, simbolismo, espeleología y turismo en cavernas.
Desde marzo de 2015 hasta en la actualidad es columnista del diario Novedades de Yucatán en donde publica los artículos periodísticos en la sección denominada Mitos y Cavernas.
Evia Cervantes es miembro de la Asociación de Cronistas e Historiadores de Yucatán desde el 3 de febrero del año 2018. Participó, junto con los demás miembros de esta asociación, en la publicación de la obra El Gran Libro de Yucatán, en donde escribió el capítulo “Los mitos en Yucatán”. (2018)
Desde el 10 de abril de 2019 forma parte de la Asociación de Jubilados y Pensionados de la Universidad Autónoma de Yucatán.
Carlos Evia ha explorado las grutas desde 1971 y hasta el presente, 2020, ha visitado 320 cuevas en 788 expediciones en los estados de Sonora, Puebla, Nuevo León, Guerrero, Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán. También ha realizado jornadas espeleológicas en las áreas cársticas de Cuba y Brasil.
Es socio fundador del Grupo Espeleológico Ajau, asociación que estudia las cuevas y cenotes de la península de Yucatán desde 1997.
En 2013 la Unión Mexicana de Agrupaciones Espeleológicas le hizo un reconocimiento por su trayectoria y por haber contribuido en la formación de muchos jóvenes que se dedican al estudio de las cavidades subterráneas.
